Nueva pastilla poética semanal. Para enamorad@s, confus@s, viajer@s, sedient@s de horizontes y visitantes de lechos ajenos en general. No dejen de besar por miedo a no besar más. Los besos que no se dan, se pierden. ¡Buen fin de semana! (y que les cunda…)
Ha muerto Juan Gelman. Tuve la ocasión de entrevistarle cuando le concedieron el Cervantes en 2007. Mirada sincera y oportuna. Verso certero y desnudo.
Habiendo tantos banqueros, los poetas no deberían morir.
«No es para quedarnos en casa que hacemos una casa
no es para quedarnos en el amor que amamos
y no morimos para morir
tenemos sed y
paciencias de animal».
Descansa, al fin, en paz.
Nueva pastilla poética con briconsejo infalible para estos días de frío. Siempre hay que encarar las dificultades en clave de oportunidad, amiguitos y amiguitas.
¡Buen fin de semana! ¡Nos vemos el domingo en El Despertar para la presentación oficial de mi libro ‘Cuaderno de Bitácora’! ¿Lo habéis comprado ya? ¡Venga, que se acaban!
Nueva pastilla poética para comenzar la semana, y con esta van cinco ya para la colección. En este caso, un canto a la utopía pero, por encima de todo, una reivindicación de la libertad y la autenticidad. Una petición educada pero imperativa y sin opción a réplica de vivir como uno quiera vivir a pesar de los riesgos. Una declaración de intenciones frente a los «deberías hacer esto o esto otro», «ya lo sabía», «te lo dije», «por ahí no vas a ningún lado» o «no se puede».
Sirva, ya de paso, para anunciar que esta semana cumplimos sueños y rozamos estrellas con las manos. Este jueves 5 de diciembre, coincidiendo con la fecha de mi próximo recital, saldrá a la luz el libro en el que llevo trabajando con cariño desde hace un tiempo y del que ya hablé por encima en los objetivos del crowdfunding que tanto nos ha unido. ¡Qué ganas! Va a ser una autoedición en la plataforma Bubok con distintos pedacitos de distintas realidades. Por ahora, no os doy muchas más pistas. En menos de tres días, os cuento todos los detalles de este ofrecimiento de fin de año a todos los seguidores de la página. Y, si os pasáis por el recital, nos lo contamos en directo y lo compartimos.
¡A soñar, mañaneras y mañaneros! ¡A soñar que es tiempo de esperanza y toca gritar que sí, se puede!
Nueva pastilla poética de regalo, y con esta van cuatro. Lo que parece que va a convertirse en una sana costumbre semanal esta vez llega en clave reivindicativa y necesaria. Frente a la Ley Anti 15M y una policía cada vez más blindada y reforzada, no nos queda otra que llamar, a voz en grito, a la poesía. Convocarla como a un sortilegio que nos saque de este adormecimiento colectivo y nos dé alas y brazos. Poesía como la de Neruda o la de Alberti, versos como los de Gioconda Belli que nos arranquen de este sueño y transformen con contundencia este sistema caduco, obtuso y represor.
¡Hay que integrar el Cuerpo Nacional de Poesía! ¡Poetas del mundo, despierten!
¡Que alguien llame a la poesía!
Nueva pastillita poética de regalo para todxs lxs lectorxs del el Mundo de Mañana. ¡Y con esta ya van tres! En esta ocasión se la queremos dedicar a Madrid, donde la metáfora política se hace literalidad en su basura, y a su relato. También, por qué no, al Metro, camino a la oscuridad de donde más temprano que tarde acabará saliendo, como un estallido, la revuelta. Hoy andamos así. Con la próxima pastillita se me pasa.
Segunda pastillita poética para la colección. En esta ocasión del poema ‘Vivir viviendo’, escrito sobre el Triángulo de las Bermudas cuando viajaba con mi amigo Arturo Warleta rumbo a Nicaragua para redactar el ‘Manifiesto Fraternista’. Sabor a destino, aroma a lanzarse. Que lo disfruten.
Y, si les gusta, lo pueden compartir (y comentar). ¡Buen miércoles!
Aquí va un regalo. De lo poco que quizá pueda dar. Mis versos, una vez escritos, ya no son míos. Aquí os los dejo, aún con el buen sabor de boca del recital de ayer, en un formato más amable que la palabra cruda sobre el papel en blanco. Por si os gusta, por si os dice algo, por si os inspira. Con esta inicio una serie de imágenes para compartir con versos míos a modo de material poético de andar por casa (y por redes). A falta de libro publicado, estas pildoritas pueden ir supliendo la necesidad que tengo de gritar. Que les guste.
Los primeros versos, necesariamente, tenían que ser estos. De ‘Alabanza de las piedras’. Habrá más.