En un ejemplo de coherencia y de liberalismo puro y duro, el Partido Popular ha llegado al extremo de privatizar el miedo. Así es.Tal y como salía ayer a los medios, con la nueva Ley de Seguridad se posibilita a los integrantes de la seguridad privada (seguratas) a realizar funciones que antes estaban reservadas a las Fuerzas de Seguridad del Estado. El vigilante del Alcampo podrá cachearte, pedirte documentación y detenerte. Se rumorea que la idea de que cualquiera te pueda cachear ha sido propuesta directamente por Mariano Rajoy, pero no vamos a entrar en cotilleos. Yendo un poco más allá, vemos que servicios como la vigilancia de cárceles y de esas infames cárceles para inmigrantes que son los CIE podrían pasar a la seguridad privada. Esto podría ser un dramático paso previo a la privatización de las cárceles (con los efectos devastadores que está comprobado que tiene en países como Estados Unidos). La seguridad como negocio. La represión y el miedo, como estrategia.
Una vez más, y como siempre, desde el Mundo de Mañana queremos apoyar al gobierno con sugerencias e ideas para llegar de una manera más efectiva a sus objetivos. Un vigilante de seguridad no necesita ni un mes de formación (ni mucho menos oposiciones) para serlo, es por ello que vemos relativamente fácil ampliar el espectro propuesto por el ministro del Interior y buscar otros colectivos que también podrían ocuparse de que nadie proteste y todo el mundo se esté quietecito y callado en su casa. Como no queremos hacer este favor a la patria nosotros solos, una vez más os pedimos vuestra opinión a través de la Encuesta de la Semana para hacérsela llegar a las altas esferas. Así, la pregunta de esta semana no podría ser más clara: «puestos a reprimir y meter miedo, ¿a quién más podrían darle autoridad para realizar detenciones en la calle?».
¡Ale, seguro que se os ocurren más alternativas! ¡No dejéis de comentarlas! ¡Y votad, maldita sea!
Ya está aquí. Tras muchos meses esperándolo y algunas semanas anunciándolo, ya está aquí. Tal y como os informábamos a través de la encuesta de la semana y las redes sociales, ha salido a la luz ‘Cuaderno de Bitácora’, mi primer libro y también el primero de el Mundo de Mañana. Es una satisfacción muy grande y todo un lujo para mí el poder contároslo personalmente a todos los mañaneros y las mañaneras a través de esta página. Actualizaciones como esta son las que compensan entradas con realidades más tristes e injustas. De vez en cuando, también apetece dar noticias buenas.
Como os digo, saco libro y un libro este muy relacionado con el Mundo de Mañana. El proyecto ya se medio anunciaba en los objetivos del crowdfunding en el que nos embarcamos en el mes de junio, en el que adelantábamos la publicación de un compendio con los mejores artículos de lo publicado hasta ahora. Así, en cuestión de medio año y en gran parte gracias al impulso de vuestro apoyo, llega para cerrar el año con broche de oro este ‘Cuaderno de Bitácora’ con las diez mejores historias de la página, el cuaderno de Nicaragua y un relato inédito sobre la realidad cotidiana de El Gallinero. Una selección recogida en 86 páginas que publico a través de la editorial Bubok, una plataforma on line de autoedición (ya llegará el día en el que la fama ponga a nuestras puertas a varias editoriales pegándose por conseguir nuestros textos y pretendan untarnos con sus premios…).
El título, ‘Cuaderno de Bitácora’, refleja, obviamente, el lugar de nacimiento de los textos que se ofrecen, pero también juega con el símil marinero. El libro no deja de ser, con sus rutas, sus paisajes, sus experiencias y sus reflejos, el cuaderno de viaje en la travesía de mis dos últimos años de vida. De ahí que la selección de las diez historias sea profundamente personal y alejada, hasta cierto punto y relativamente, de la actualidad. Dejo las noticias para el digital. Al papel he querido trasladar aquellas vivencias que no quiero que se lleve el viento.
Como podéis ver, la cosa puede ser apetecible, más en estos momentos del año en los que es más fácil sacar tiempo para leer y para regalar (guiño, guiño). Podríamos decir, exagerando cual periodista, que es casi una pieza de colección para los seguidores de el Mundo de Mañana, un libro que está pidiendo a gritos vuestra estantería, oh mañaneros y mañaneras!
¿Cómo conseguirlo? Muy sencillo, sólo tenéis que pinchar en este enlace y os lleva directamente a la librería de Bubok. Allí, por diez leuros de nada, podéis haceros con la edición en papel y por cuatro leuros con la edición para ebook, que de todo habrá. También podéis acceder pinchando en la imagen que abre el artículo (que no es otra que la portada del libro), os llevará hasta ese mismo sitio. ¡Y, oye, si os gusta la cosa y creéis que merece la pena, no dejéis de compartirlo con vuestros conocidos!
La presentación oficial en sociedad será este domingo en un recital (el último del año) que daré ex profeso en el café El Despertar (C/Torrecilla del Leal, 18; <M> Antón Martín) a eso de las 21:30. ¡Si ya os habéis hecho con vuestro ejemplar, os lo firmo! ¡Venid, anda, que va a ser un recital con banda y muchas sorpresas!
¡Espero que os guste! ¡Gracias por vuestra confianza!
EL DERECHO HUMANO:
Artículo 13:
LOS DATOS:
LAS FOTOS (en dos bloques muy bien diferenciados):
El grupo que ha conseguido alcanzar la costa, retenido por la Guardia Civil y la Policía. / Foto: Cadena SER
La Agencia EFE dando el dato de que el «asalto» ha sido con «violencia». No se especifica de parte de quién.
LA DEFINICIÓN (de la RAE):
Asaltar: Acometer impetuosamente una plaza o fortaleza para entrar en ella escalando las defensas.
Hoy, como tantos otros días, la injusticia y el atentado a los Derechos Humanos se vuelve a hacer patente en las infames vallas de Ceuta y Melilla. Nuestro medios de comunicación, con su lenguaje belicista, lo siguen justificando criminalizando a los desposeídos. Si queréis más información (digna) sobre este suceso de actualidad, os invito a pinchar en este enlace.
El pasado viernes, RTVE nos sorprendía en su edición del mediodía del Telediario con este reportaje. No dura un minuto y en él se explican las «maravillosas condiciones» de las que disponen los inmigrantes en los Centros de Internamiento para Extranjeros (CIE). Para ejemplificarlo, se van hasta el de Ceuta (que allí se llama CETI) donde, entre idílicas imágenes de la vida cotidiana dentro del centro, se ve un torpe delegado del Gobierno que no es capaz de justificar su existencia sin poner mil excusas y cara de Europa.
Se les olvida en este reportaje mencionar que los CIE no son ni más ni menos que cárceles para inmigrantes, unas cárceles racistas e ilegales según el derecho internacional que deberían estar prohibidas en nuestro territorio. Los CIE son nuestros pequeños Guantánamos, uno de los mayores atentados a los Derechos Humanos que hay en nuestro país. Se encierra a personas hasta seis meses (y si no consiguen repatriarles se les lleva a otro otros tantos meses) por el terrible delito de no tener papeles. No tener papeles, en realidad, según nuestros códigos, no es ningún delito, simplemente es una falta. Con todo, se llega a encerrar a personas hasta seis meses por esta falta separando a familias (hombres por un lado y mujeres por otro) y limitando su libertad. Se les olvida comentar también en el reportaje que son los primeros agentes externos que logran entrar a un CIE. Está prohibido. Tanto para ONG como para agentes sociales o garantes de Derechos Humanos. En un CIE, directamente, no se entra.
Uno, que precisamente conoce ese CIE, el de Ceuta, y tiene varias fotos muy distintas a lo que se ve en este dulcificado reportaje, para calmar su profunda indignación y cabreo ante este reportaje innecesario y mentiroso, lanza la Encuesta de la Semana. Así es, amiguitos y amiguitas de el Mundo de Mañana, hoy queremos saber, desde vuestro punto de vista, qué diríais que son los CIE según este vídeo de RTVE.
¡No dejen de verlo! ¡No dejen de responder!
Un padre perdido y sólo en medio del desierto del Sáhara buscando desesperadamente a su compañera y a su hija de cuatro años, las cuales, a su vez, han emprendido semanas antes una ruta imposible a través de ese mismo desierto camino de España, donde creen que todavía sigue encerrado el hombre que está detrás de ellas. No es el argumento de una película. No se trata de una novela de algún autor New Age con una enrevesada metáfora sobre la vida y el destino. Pasó. Y pasó muy cerquita de aquí, en una historia que comienza con una travesía de cuatro años por África camino a la prosperidad y tiene su trágico punto de inflexión en el siniestro CIE de Málaga.
Debido a mi trabajo junto al partido Por Un Mundo + Justo he tenido la ocasión de acercarme y visitar en dos ocasiones el CIE de Ceuta (allí CETI), la última con motivo del comienzo de la campaña electoral de las pasadas generales. Tras la ya tradicional «pegada» de carteles en la valla infame que separa los dos continentes como gesto de denuncia y como símbolo del punto donde comienza esta lucha, iniciamos el ascenso a la colina donde lxs inmigrantes son encerradxs por el mero hecho de serlo. Las historias que allí se narran parecen sacadas, si no de una película de ficción, al menos relatadas desde un país lejano tanto en kilómetros como en derechos. Sin embargo son historias que pasan dentro de las fronteras de nuestro territorio nacional, atravesando los no más de 14 kilómetros del Estrecho de Gibraltar, en ese mundo irreal y como sacado de otro siglo que es Ceuta. Familias ahogadas al intentar cruzar a nado la escasa distancia que separa Marruecos de España aprovechando los días de niebla, miles de subsaharianxs viviendo en montes y colinas esperando, durante años, el momento de saltar, disparos en la frontera, cementerios flotantes, vallas triples de más de siete metros. Francisco Javier, taxista veterano, nos cuenta, al llevarnos a conocer el paso fronterizo donde más inmigrantes han fallecido, que algunxs internxs pueden llegar a estar hasta tres años encerrados en el CETI y que luego, cuando ya no caben más (hay unos 600 internxs en un centro preparado para 200), lxs llevan por otros CIEs de la península hasta que consiguen los medios y los convenios necesarios para deportarlxs. Increíble.
No tuvieron que esperar tanto, sin embargo, los protagonistas de la historia que quiero recordar hoy. Sucedió hace casi cuatro años, el 22 de octubre de 2008. Tras varios años de travesía por diversos países africanos desde su Sierra Leona natal y de espera tensa en Marruecos, Sony Benedu, su compañera Esther, de la que se enamoró a lo largo de su particular aventura, y la pequeña Gift, hija de ambos nacida en las noches de hambre marroquíes, consiguen embarcar hacia España con tal mala suerte que su cayuco zozobra en las frías corrientes del estrecho y tienen que ser rescatados por las fuerzas de seguridad. Fueron trasladados directamente a ese CIE de Málaga tan denunciado en estos días por sus ruinosas condiciones, certificadas por su precintado exterior a pesar de seguir lleno de reclusxs. Allí fueron separados, los hombres a un lado y las mujeres a otro, y, tras pasar aproximadamente 40 días internados, el Estado decide deportar, «por razones humanitarias» como dirá después la policía, a la madre y a la hija. Sólo se les pasó un pequeño detalle por alto: al no tener convenio de repatriación con Sierra Leona, deciden que enviarlas directamente y sin informarlas a Nigeria, a cinco países del suyo, es la mejor opción. Perdidas y solas, Esther y Gift Benedu, de cuatro años, no tienen forma alguna de avisar al padre de la niña de su paradero. Cuando este se entera, dos días después de la deportación, sufre una crisis de ansiedad que requirió asistencia médica, motivo por el cual es deportado al día siguiente también a Nigeria. Sony logra ponerse en contacto con la Coordinadora de Inmigrantes de Málaga, la cual transmite su denuncia al CIE y exige responsabilidades al mismo, pero no consigue encontrar ni rastro de su familia. Tras tres meses desesperados de búsquedas, llamadas, investigaciones y vagabundeos en un país en el que no todo el mundo habla su idioma, descubre, con horror, la pista más probable del paradero de su compañera y su pequeña niña. Convencidas ellas de que Sony sigue encerrado en España, optan por retomar el camino de vuelta a Europa atravesando el desierto para llegar a Marruecos de nuevo y allí, esperar la oportunidad para saltar al continente y reencontrarse. Cuando Sony asume esta posibilidad, y se resigna al hecho de que es la única que tiene, decide lanzarse al desierto en un camino a ninguna parte en busca de su familia.
Esto es lo último que se supo de Esther, de la pequeña niña Gift y de Sony. Esta misma mañana, queriendo saber el final de la historia, me puse en contacto con Gerardo, de la Coordinadora de Inmigrantes de Málaga, el cual me confirmaba cómo la última llamada que recibieron de Sony fue la que certificaba finalmente que se iba tras su mujer y su hija. Después, nada.
Estas historias, que, como decía al principio, parecen las de una película porque no queremos creer que sean verdad, son la crisis. Esto que permite nuestro Estado, con nuestra connivencia, es la crisis. Y no sale en las portadas de los periódicos, y no ocupa espacio en las tertulias de sabios, y no protagoniza los programas electorales. Sin embargo la calle, que ya sabe que tiene vuelve a tener voz, lleva una semana dando miles de #razonesCIErre. Mañana viernes saldrán a protestar en Barcelona y Valencia para exigir la clausura de estos pequeños Guantánamos patrios. Ojalá se consiga algo, aunque sea mover la opinión de los que aún no saben lo que está pasando. Mientras tanto, la niña Gift, seguirá recorriendo los desiertos de nuestra insolidaridad y de nuestra injusticia.
Uno de los personajes que me traje en la mochila hondureña fue, paradójicamente, el Mahatma Gandhi. Su frase «no hay camino para la paz, la paz es el camino» presidía, junto a su retrato y el de Monseñor Romero, uno de los muros de Paso a Paso, el centro juvenil para chavos y chavas con ganas de soñar y saberse especiales donde tanto aprendí, disfruté y viví junto a mis amigos Silvia y a Óscar. El mero hecho de invocar el nombre del personaje convertido en icono del pacifismo y la no violencia en uno de los sectores más peligrosos de la ciudad que hace pocos días ha recibido el más que dudoso honor de ser la más violenta del mundo, por encima ya de Ciudad Juárez, era y es en sí mismo un acto cotidiano de heroísmo. Así, sintiéndome interpelado por la mirada que refugiaban los lentes redondos, devoré la biografía del líder independentista de India.
Una de mis aficiones desde el bachillerato consiste en investigar qué era lo que leyeron los personajes que admiro de las más diversas disciplinas para convertirse en lo que luego fueron. Qué versos inspiraron a tal poeta, qué ideas trastocaron a aquel filósofo, qué novela puso en pie al héroe… En algunos casos, si el personaje me fascina especialmente o siento que hizo las cosas como deben hacerse, me adentro en sus lecturas con el ánimo de que se me contagie algo que me ayude a hacer de este mundo ese otro en el que creo. Tras leer, de manera providencial, algunos capítulos de ‘El Reino de Dios está en vosotros’, de Lev Tolstoi, y a la espera de conseguir un ejemplar decente del ‘Baghavad gita’, anoche me terminé ‘Sobre el deber de la desobediencia civil’ de Henry D. Thoreau, tres de los libros que marcaron definitivamente y para siempre la lucha y la vida del Mahatma Gandhi.
No he podido evitar, tras mi lectura con nocturnidad y alevosía, rescatar algunas frases del libro y compartirlas con vosotros y vosotras, no sea más que por recordármelas a mí mismo y lanzarme a ponerlas en práctica. Son 18, las mismas que años hacen falta para ser considerado mayor de edad, en espera de que sirvan de abono para una revolución madura. Que las disfruten:
1.- «¿Debe el ciudadano someter su conciencia al legislador por un solo instante, aunque sea en la mínima medida? Entonces, ¿para qué tiene el hombre su conciencia? Yo creo que debiéramos ser hombres primero y ciudadanos después. Lo deseable no es cultivar el respeto por la ley, sino por la justicia. La única obligación que tengo derecho a asumir es la de hacer en cada momento lo que crea justo.»
2.- «Unos pocos, como los héroes, los patriotas, los mártires, los reformadores en un sentido amplio y los hombres sirven al Estado además con sus conciencias y, por lo tanto, las más de las veces se enfrentan a él y, a menudo, se les trata como enemigos.»
3.- «Todos los hombres reconocen el derecho a la Revolución, es decir, el derecho a negar su lealtad y oponerse al gobierno cuando su tiranía o su ineficacia sean desmesurados e insoportables.»
4.- «(…)cuando una sexta parte de la población de un país que se ha comprometido a ser refugio de la libertad está esclavizada, y toda una nación es agredida y conquistada injustamente por un ejército extranjero y sometida a ley marcial, creo que ha llegado el momento de que los hombres honrados se subleven y rebelen.»
5.- «Si le he quitado injustamente la tabla al hombre que se ahoga, debo devolvérsela aunque me ahogue yo.»
6.- «Por cada hombre virtuoso, hay novecientos noventa y nueve que alardean de serlo.»
7.- «Incluso votar por lo justo es no hacer nada por ello. Es tan sólo expresar débilmente el deseo de que la justicia debiera prevalecer.»
8.- «Si me entrego a otros fines y consideraciones, antes de dedicarme a ellos, debo, como mínimo, asegurarme de que no estoy pisando a otros hombres.»
9.- «Al soldado que se niega a luchar en una guerra injusta le aplauden aquellos que aceptan mantener al gobierno injusto que la libra.»
10.- «¿Cómo puede estar satisfecho un hombre por el mero hecho de tener una opinión y quedarse tranquilo con ella? ¿Puede haber alguna tranquilidad en ello si lo que opina es que está ofendido?»
11.- «Un hombre con más razón que sus conciudadanos ya constituye una mayoría de uno.»
12.- «Estoy seguro de que si mil, si cien, si diez hombres que pudiese nombrar, si solamente diez hombres honrados, incluso si un solo hombre honrado en este Estado de Massachussets, dejase en libertad a sus esclavos y rompiera su asociación con el gobierno nacional y fuera por ello encerrado en la cárcel del condado, esto significaría la abolición de la esclavitud en América.»
13.- «La reforma cuenta con docenas de periódicos a su favor, pero ni con un solo hombre.»
14.- «bajo un gobierno que encarcela a alguien injustamente, el lugar que debe ocupar el justo es también la prisión.»
15.- «Si las alternativas son encerrar a los justos en prisión o renunciar a la guerra y a la esclavitud, el Estado no dudará de cuál elegir. Si mil hombres dejaran de pagar sus impuestos este año, tal medida no sería ni violenta ni cruel, mientras que si los pagan, se capacita al Estado para cometer actos de violencia y derramar la sangre de los inocentes. Esta es la definición de una revolución pacífica, si tal es posible.»
16.- «(…)aquellos que afirman la justicia más limpia y, por tanto, los más peligrosos para un Estado corrompido, no suelen haber dedicado mucho tiempo a acumular riquezas.»
17.- «Pero los ricos (y no se trata de comparaciones odiosas) están siempre vendidos a la institución que les hace ricos. Hablando en términos absolutos, a mayor riqueza, menor virtud; porque el dinero vincula al hombre con sus bienes y le permite conseguirlos y, desde luego, la obtención de ese dinero no constituye en sí mismo una gran virtud. El dinero acalla muchas preguntas que de otra manera tendría que contestar, mientras que la única nueva que se le plantea es la difícil pero superflua de cómo gastarlo.»
18.- «Decía Confucio: Si un Estado se gobierna siguiendo los dictados de la razón, la miseria y la pobreza provocan la vergüenza; si un Estado no se gobierna siguiendo la razón, las riquezas y los honores provocan la vergüenza.»
Y en mi cabeza, los CIEs, las detenciones arbitrarias, la violencia de los antidisturbios contra manifestaciones pacíficas, el príncipe Felipe sentándose a la mesa de los que matan campesinos y golpean al pueblo en Honduras…
Hoy todo tuiter da sus razones para cerrar, de una vez, esas cárceles ilegales, inmorales e injustas para inmigrantes que son los CIEs. Puedes leerlas todas aquí.